El destino me ha llevado a Santa Fe, remodelado de basurero hace treinta años a ghetto el día de hoy. En treinta años mas va a ser como Harlem, ni los negros van a querer vivir o trabajar ahi.
Loa zona carece de buen transporte, lo menos malo es llevar el auto, para los que tenemos auto. Llegando a Santa Fe, el problema es donde dejar el auto porque la mayoría de las empresas simplemente no tienen estacionamiento para visitantes. Estacionamiento público si hay, pero es de valet, con el consiguiente costo. El costo sin valet anda por ahi de los 24 pesos por hora.
La zona carece de luz decente, parece cueva de lobo porque aunque las luminarias están ahi, me parece que o nadie las enciende o que les cortaron la luz por falta de pago.
No hay iluminación directa, es decir, todos los edificios son tan altos y la calle suficientemente estrecha para que no se vea el sol, mas que al medio dia y por espacio de veinte minutos.
No hay una buena relación de áreas verdes a zonas construidas. Es mas, simplemente no hay áreas verdes, mas que un parquecito pinchurriento sobre el circuito de González Camarena.
Vasco de Quiroga si es ancho, lo suficiente como para que te sientas en un circuito de Fórmula 1, en donde los autos circulan a 80 kph y tocando el claxon. Me siento mas seguro cruzando el Periférico a pie, que cruzando Vasco de Quiroga.
En fin, que no me gusta el lugar, parece un ghetto y seguramente lo será en unos veinte o treinta años.
Me quedé pensando, yo conozco un lugar como este, pero, ¿en donde será?
Haciendo memoria, Sao Paulo, Brasil, está igual. Los edificios son de diez pisos para arriba, no hay luz de sol, los autos cruzan a toda velocidad, no hay parques y parece vecindad de Tepito. Alguien copió el modelo brasileño, que no es bonito, pero este salió peor.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario